El adiós.

Aquella noche soñó,
Quien le roba la vida,
Había escrito en un 
Espejo,sus miedos,
Inseguridades y dudas.
Encarnó en sueños,
Lo que ella,en vida
Callaba.
Y lloró tanto,tanto...
Al ver,que,quién 
Le arropa todas 
Las mañanas cuando
Se levanta para trabajar,
Quién apacigua sus dudas,
Con sus cariñosos Te quiero.
Ese,su mitad,le dijo todo
Lo que afligía su corazón.
Lo dijo en sueños.sí....
Pero fue suficiente,para que 
Ella,al despertarse,entre 
Sosiego y tranquilidad,
Fuera desvistiéndose,
Del camisón del pasado,
Ese que tanto le atormenta,
Y persigue.
Se quitó las zapatillas,
De pisar el silencio.
Ningún sufrimiento fue 
En vano,nada olvidará.
Y aunque atormentada 
Estuviera,va aprendiendo
El calor del hogar.
Ese hogar de sus manos 
Calientes,de sus besos apasionados,
Del deseo de su mirada,
El hogar cómplice de amor a tres.
Y aunque a veces,no se mira 
Al espejo,cuando lo hace
Luce radiante.
Poco a poco,va aprendiendo 
A despojarse del pijama 
Invisible que la encarcelaba,
En sinseres y sinsaberes absurdos.
Y se puso su traje,de buena mañana,
Verde,que tanto le gusta,
Y se quitó la coraza,
Del - "estoy bien",-"no me pasa nada".
Y entendió que hay que seguir 
Cada día,por muy cuesta arriba
Que se haga.
Porque sólo ella sabe
Lo fuerte que es,
Y es entonces,cuando
Se le escapa una sonrisa 
De orgullo y amor propio,
Cantando canciones
A toda voz en el coche,
Camino del trabajo.
Ama soñar,aunque a veces,
Vengan nubes en ellos.
Porque "los sueños,
Sueños son" y la vida
Que ha vivido sólo
El hormigón que pisar
En su vía de la plata,
En su hogar.
Cimientos que la hacen 
Más fuerte,y dejar la tierra
Donde debe estar,
En el suelo.
Camina tranquila.
Dulces sueños bonita.